sábado, 28 de julio de 2007

Andar por la sierra de la Demanda (1990)


Confieso que empece a descubrir esta sierra con el señuelo de los atractivos gastronómicos de Ezcaray, propuestos insistentemente por Miguel Hoyos. Pero he de reconocer que, después de las consabidas visitas al Echaurren y a otros sitios de mala reputación, Miguel y sus amigos me acompañaban fielmente por los andurriales en torno al pico San Lorenzo.
Fue un verano fantástico.
Un año después, en 1991, salía la segunda edición.
La dedicatoria decía: A mi hijo Manolo, compañero constante en estos y otros caminos.